Los blancos aumentan su leyenda en la Champions y conquistan Wembley gracias a los goles del brasileño y el español. Son 6 las conseguidas en la última década y leyendas como Nacho, Modric, Kroos y Carvajal igualan a Gento con 6 Copas de Europa
La historia de amor entre el Real Madrid y la Champions League sigue más viva que nunca. después de otra noche mágica europea en Wembley. Los merengues ganan 0-2 al Borussia Dortmund en tierras londinenses gracias a los tantos de Carvajal en un córner y de Vini Jr aprovechando un error en salida del conjunto alemán y una gran asistencia de Jude Bellingham. El carioca lleva dos goles en dos finales de Champions, poniendo el broche a una década mágica para el madridismo con 6 Copas de Europa de las últimas 10 ediciones disputadas. Hegemonía absoluta.
Después de una primera parte en la que el Dortmund fue superior y en la que dispuso de más ocasiones, el Real Madrid aprovechó la segunda parte para reaccionar y hacerse con la 15ª Copa de Europa de su historia. La dimensión del triunfo es tal que hasta 4 jugadores de la plantilla madridista pueden decir que tienen 6 Copas de Europa en su palmarés. Uno de ellos Toni Kroos, que no podía retirarse mejor del club blanco que con la asistencia del primer gol y la consecución de otra ‘orejona’. Iguala al legendario Paco Gento como el jugador con más Champions, al igual que sus compañeros Luka Modric, Dani Carvajal (MVP de la final) y Nacho Fernández.
Nadie dijo que sería fácil
Que el Real Madrid partía como favorito en esta final lo sabían y lo reconocían hasta los antimadridistas más recalcitrantes. Kilo por kilo era superior a un Borussia Dortmund que en la primera parte no se achantó para nada y puso contra las cuerdas a los blancos. Los alemanes demostraron en 45 minutos porque estaban en esta final de Wembley. Gozaron de más ocasiones y dominaron a un Madrid por momentos incrédulo.
La primera ocasión se le apuntó a Julian Brandt en una situación delante de la portería que no definió bien. Con el primer susto en el cuerpo para los merengues, el Borussia siguió acechando la portería defendida con Courtois. Su verticalidad característica en esta Champions parecía imparable y de ahí surgieron los dos mano a mano de Karim Adeyemi ante el meta belga. El primero no entró por una gran segada de un Carvajal imperial tras regatear a ‘Tibú’, y el segundo por un paradón del portero madridista.
Aunque sin duda la gran ocasión de la primera mitad fue el disparo de Füllkrug que pegó en el poste. Ocasiones de esas no se tienen muchas en la vida, y menos en una final de Champions. Sin duda la oportunidad más clara del combinado amarillo y negro, y de la que seguramente se estarán lamentando mucho tiempo. Ese palo le ha costado una Copa de Europa.
El Real Madrid se estaba salvando y seguía vivo, pese a no meter miedo a su rival. Dos tiros lejanos de Vini y Valverde desde fuera del área fue lo máximo que generó el equipo entrenado por Ancelotti. Sufrieron mucho a la contra y la posesión del balón en la que si ganaban era totalmente estéril. A la llegada del descanso estaba claro que el Madrid necesitaba reaccionar cuanto antes. Nadie dijo que sería fácil.
El Rey de Europa agranda su leyenda
«En el descanso solo hablaron los capitanes y con eso bastó». Estas fueron las palabras de Fede Valverde en zona mixta tras el partido, mostrando cómo fue la charla en el entretiempo. Una muestra más de lo que es el Real Madrid y de lo que se respira y se vive en ese vestuario. Los capitanes asumieron la responsabilidad que las da ese rol para levantar a un equipo que no había casi comparecido en los primeros 45 minutos de una final de Champions.
Por lo que se ve la bronca de los capitanes funcionó. El Real Madrid salió con otra actitud en la segunda parte. Más agresivo en la presión y en la recuperación del balón, más decidido a la hora de tener el balón en sus posesión, y sobre todo en busca de la portería contraria. Sin duda Vinicius es el experto en desatascar y revolucionar partidos a base de velocidad y regate. Desequilibró a la defensa y aumentó el ritmo de juego del equipo. Bellingham y Rodrygo también quisieron sentirse protagonistas de la reacción blanca.
Pero sin duda, el mejor de todos fue Dani Carvajal. El que puso la primera piedra para la Ciudad Deportiva en Valdebebas, completó un partido de ensueño en todos los sentidos. Insuperable en defensa y agresivo en ataque. Siendo el lateral derecho del equipo fue el que realizó más remates a portería en el segundo tiempo. Uno de ellos, el que supuso que marcara el gol que abría la lata y el gol de su vida. Gran centro de Toni Kroos desde el córner izquierdo y remate portentoso de cabeza para batir a Kobel. Para el recuerdo la foto del de Leganés saltando con su 1,70 por encima del delantero del Dortmund Füllkrug con 1,90 de altura.
A partir del tanto del lateral español, el Real Madrid fue una apisonadora en busca de sentenciar y cerrar la final de Wembley. A los pocos minutos, Jude Bellingham tuvo una ocasión clarísima en boca de gol que no entró por el roce de un defensa al esférico. Luego Camavinga casi marca un golazo por la escuadra si no llega a ser por un paradón del guardameta del Borussia Kobel. El portero suizo también fue primordial para que evitar hasta en dos ocasiones dos golazos de falta de Toni Kroos. El teutón quería su gol para rematar una carrera legendaria en el Real Madrid. Sin embrago, el que puso la puntita a la final fue Vini Jr. Disparo cruzado con la izquierda, tras un gran pase de Bellingham y aprovechando un error en salida de su rival.
Con este son 2 goles en 2 finales de Champions consecutivas para el brasileño, que con solo 23 años ya es una leyenda del Real Madrid con letras mayúsculas. Termina la temporada con su 2ª Copa de Europa, con 24 goles y 11 asistencias y con olor fuerte a Balón de Oro. El otro nombre propio es la otra pieza que completa el dúo mágico del Madrid esta campaña: Jude Bellingham. El inglés termina su primera temporada con un doblete de Liga y Champions y con estadísticas que también le acreditan como un serio candidato a ser nombrado como el mejor jugador del mundo (23 goles y 13 asistencias).
La leyenda del Rey de Europa continúa y se agranda cada vez más. Ya son 15 Champions y no tiene pinta de que la cuenta cese los próximos años. Carlo Ancelotti, 5ª Copa de Europa en sus carrera por cierto, ha sido el artífice de un equipo que ha completado un año espectacular con un doblete mágico de Liga y Champions pese a todas las dificultades sufridas sobre todo al principio. Ha sabido construir un equipo solidario, comprometido, organizado y con mucho talento que, junto con lo que viene, pueden construir una hegemonía en el fútbol mundial. Ahora toca celebrar, disfrutar y pensar en la 16ª.
